Imágenes computarizadas y rinoplastia

Los desarrollos tecnológicos de la última década han abierto posibilidades insospechadas en el área de las cirugías de nariz. Además de brindar mejores dispositivos y herramientas para realizar las intervenciones han prestado ayuda a la hora de responder a las inquietudes de un paciente que desea saber cómo lucirá después de una operación.

Las imágenes computarizadas son herramientas insustituibles a la hora de evaluar las diferencias reales que podrán observarse en el rostro de un paciente que se haya sometido a una rinoplastia. Una de las ventajas de la aplicación de tecnologías de visualización para rinoplastia es que podremos cotejar en una misma pantalla el antes y el después de la operación de un rostro, incluso antes de haber tomado la decisión de realizarla.

Al mismo tiempo, brinda a cada paciente la posibilidad de indicarle al especialista detalles precisos sobre sus gustos respecto a los resultados esperados de la operación. De igual modo, el especialista mostrará sus recomendaciones y, eventualmente, se sugerirá algún retoque adicional en el mentón, las mejillas o al nivel de las mandíbulas.

En los casos en los que los pacientes tienen muchas dudas respecto a la conveniencia o necesidad de una cirugía de nariz, las imágenes computarizadas casi siempre ofrecen la respuesta adecuada. Por medio de estas imágenes algunos pacientes podrán comprobar que cambios muy pequeños pueden tener enormes resultados en la forma del rostro, descartando de esta manera intervenciones que sean muy invasivas.

Vale destacar que las imágenes computarizadas no ofrecen una certeza absoluta de la imagen que tendremos después de una operación, ofreciéndose como herramientas de apoyo adicional y mostrando una imagen digital más o menos cercana. Para que cada paciente pueda comprobar el nivel de aproximación de las imágenes virtuales a la realidad los especialistas suelen mostrar resultados efectivos junto a pronósticos virtuales en casos similares a los de la persona que consulta.